(2) Una vida capturada por el deseo de una pasión...

Después de todo el jaleo de la fiesta mi padre se acerco con cierta cautela

.-benjamín ¿Cuándo le piensas decir?.-

Es verdad, la fiesta se hizo para esto debí haber olvidado que era una ´´fiesta de compromiso´´, pero estaba tan feliz de que ella accediera a intentar algo así, que me concentre solo en estar con ella, mirarla, tocarla que sonriera   junto a mí, que estuviera tan feliz y lo mejor de todo es que de ahora en adelante así sería su vida, sin preocupación alguna y junto a mí.

.-benjamín te estoy hablando, contesta

-discúlpame padre, pensaba muy lentamente, tienes razón que preparen todo y lleven a los invitados a la fuente ahí pediré su mano-

.-como gustes hijo.-

En realidad me encantaba esa fuente, además mi madre leía todos los días ahí por lo era de gran valor.

_benjamín_

-si Casandra-

_amm ¿a qué hora lo harás?

-en eso se esta acompáñame, quiero que veas algo-

_de acuerdo_

Mientras la llevaba hacia la fuente le conté el gran valor de todo aquello

-Casandra en verdad te agradesco y quiero que sepas el gran significado, pues esta es una gran oportunidad para conocernos-

_benjamín te confieso que para mí fue sorprendente todo esto, porque si no me conozco a mi misma ¿cómo conocer a alguien más?, pero en verdad me gustas y..._

-continua-

Casandra se detuvo frente a mí y pude notar que una lágrima caía de su mejilla

-¿Por qué las lagrimas?-

_no lo sé tal vez de desesperación o intriga o angustia ya ni siquiera lo se_

-yo estoy aquí Casandra a tu lado, no me alejare de ti ni un segundo prometo que te protegeré-

Poco a poco me fui acercando a Casandra para poder besarla y que sintiera mi amor por medio de este, pero mi padre interrumpió

.-benjamín ya estamos listos.-

-gracias Adolph, benjamín puedo saber ¿para qué estamos listos y a dónde iremos?-

Casandra se adelanto un paso y tomo mi mano

_supongo que es la hora ¿verdad?_

-sí, vamos-

Definitivamente era la hora la mano me temblaba recordé donde había puesto el anillo, pero claro en el bolsillo ¡que nervios¡ pero era el momento de una nueva vida al lado de Casandra.

Nos colocamos donde la fuente, me arrodille y tome su mano, vaya Casandra parecía emocionada como si esto lo hubiese esperado por mucho tiempo, así que lo dije:

-Casandra ¿quieres casarte conmigo?...