jueves, 19 de agosto de 2010

El comienzo de un destino...

-Definitivamente no sabias lo que decías, no te preocupes-
Casandra:
_Estaba helada, que yo dije te amo, no puede ser, una increíble coincidencia, debía serlo aunque...
_¿Por qué me sentí tan segura al decirlo?, bueno fue en otro idioma que no conozco pero lo dije ¿será que de verdad..., no claro que no, ¿Cómo podría amar a una persona que conozco desde hace dos días?_
_Además todavía faltaba por resolver como es que había llegado ahí y porque no recordaba nada, así que aunque pareciera ridículo ¡no tenía tiempo para eso¡_
Después de disculparme con benjamín sobre el inevitable te amo, quede sonrojeada por lo que mi nerviosismo se hacía notar. Al ver a benjamín a los ojos tenia lagrimas en ellos y me abrazo lo más fuerte que pudo y me susurro:
-´´me hubiera encantado que fuese cierto´´-
_pero?... no que...
no podía decir nada era como si me hubieran quitado mi voz, casi automáticamente lo abrase, después de eso volvimos a la moto regresamos a la cabaña no dijimos nada en el camino. al llegar, benjamín empezó a preparar el desayuno seguíamos sin hablar, pero una distracción de benjamín hizo que gritara
¡Cuidado¡
_dos segundos más y te pudiste haber cortado_
Me acerque a él ya que el cuchillo que sostenía lo había colocado en una mala posición y con el jaleo se cayó si no le hubiese advertido el cuchillo hubiera entrado en contacto con su piel creando una gran herida
Benjamín:
-Gracias Casandra-
Vaya que extraño en verdad estaba muy distraído, como sea serví el desayuno y en el lapso de tiempo en que prepare la ducha, nos sorprendió un grandioso eclipse, el más hermoso que haya visto y lo mejor fue que lo compartí con Casandra, ella se quedo pasmada solo lo miraba atónita aunque su rostro había cambiado tenía una esencia muy admirable, me atraía
-es realmente hermosa-
_que... ¿Por qué lo dije en voz alta?, aunque Casandra estaba demasiado distraída estaba seguro de que me había escuchado
-Casandra yo...
Ella volteo demasiado rápido y me sorprendió dándome un beso al cual correspondí de una manera inigualable; nos besamos apasionadamente.
Casandra me miro parecía muy feliz e inmediatamente se desmayo, no sé porque pero cuando cayó en mis brazos, el eclipse termino y comenzó a llover como aquella vez que la encontré en el bosque fue demasiado extraño ya que sentí que revivía el momento, aunque esta era una perfecta oportunidad para iniciar el cometido que se me había encargado ya que aquel sujeto nos miraba esperando a que la sangre derramada cobrara venganza en Casandra.














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